El MoraBanc Andorra se ha caracterizado esta temporada como local por vencer la práctica totalidad de sus partidos, a pesar de llegar en todos ellos a los instantes finales con el marcador igualado o incluso en desventaja. Pocos partidos han sido la excepción, entre ellos el de hoy en el que los andorranos consiguieron ventajas superiores a los 10 puntos muy pronto en el partido y las han administrado con mucha sobriedad, de forma que el intercambio constante de parciales constante durante los tres últimos cuartos del partido nunca han puesto en riesgo la victoria local.

El inicio del partido ha estado marcado por una brillante defensa andorrana. Los locales salieron muy activos y respondieron al triple inicial de Hettsheimeir con un parcial de 11-0 construido desde atrás ahogando la circulación visitante y forzando pérdidas y tiros forzados (11-3). A la salida del tempranero tiempo muerto que tuvo que pedir Cuspinera el Fuenlabrada empezó a ver aro aunque fue a través de una única, el brasileno Hettsheimeir que monopolizó los 11 primeros puntos fuenlabreños. Mientras, el MoraBanc perdió frescura y el partido se igualó (13-11). Peñarroya inició las rotaciones y la entrada de Burjanadze (que fue duda hasta 15 minutos antes del encuentro y sus 12 minutos fueron los únicos con un 4 en pista) y Stevic dio continuidad al inicio andorrano dando una ventaja de 8 puntos al término de los primeros 10 minutos (24-16).

El segundo cuarto se inició con un intercambio de canastas entre las segundas unidades hasta que MoraBanc recompuso su quinteto y fue abriendo diferencias a pesar de que el acierto exterior no aparecía. Con Schreiner y Albicy excelentes en la dirección (14 asistencias entre ambos), Shermadini gobernando la zona en una gran parte del cuarto, Stevic aportando puntos y rebotes desde la posición de 4 y Walker mostrando destellos de lo que iba a ser su gran segunda parte, el MoraBanc se iba al descanso con una clara ventaja que reflejaba su superioridad (49-33).

Pocos han sido derrotados con contundencia en Andorra y Montakit Fuenlabrada no quería romper la tendencia. Los visitantes entraron al tercer cuarto con una marcha más que el MoraBanc y conseguían un parcial de 2-8 en los 2 minutos iniciales comandados por un Popovic que empezaba a sentirse cómodo en pista y Paco Cruz como brazo ejecutor (51-41). Peñarroya lo paró rápido y visiblemente enfadado en el banquillo reactivó a sus jugadores, que contestaron con 2 buenas canastas de Jelínek y recuperaron la intensidad defensiva y las transciones rápidas para llevarse también el tercer cuarto y ampliar la ventaja hasta un 76-57 que parecía definitivo.

Y efectivamente fue definitivo. Marko Popovic por fin destapó todo su talento y empezó a anotar compulsivamente (máximo anotador del partido con 21 puntos), pero cualquier intento visitante de entrar en el partido era sofocado por el MoraBanc, especialmente por un inspirado Waler que anotó 3 triples en el último cuarto (5 en total, jugando muchos minutos en la posición de 4). El 79-68 previó al tiempo muerto local a falta de 6 minutos fue lo más cerca que vieron los visitantes el final ajustado, ya que a la salida del mismo un parcial de 9-0 culminado por un mate de Jelinek cerraba el partido (88-68) y daba paso a los minutos de la basura en los que el MoraBanc bajó drásticamente el ritmo y dio entrada a los jugadores no habituales que cubrían las bajas en el roster, evitando un resultado más contundente para dejarlo en un 96-78 final.

Con esta importante victoria el MoraBanc ya suma 15 y se queda a una de 16 que todo apunta que marcarán el corte para el playoff. Si esta victoria llegara la próxima jornada en la pista de un Bilbao Basket que cayó con estrépito en Badalona (82-55) en el mano a mano que mantiene con el MoraBanc por la octava plaza, los de Peñarroya serían virtualmente (o matemáticamente en función de los resultados de UCAM Murcia) equipo de playoff a falta de 3 jornadas para el término de la Liga Regular.

Las claves:

• La mejor circulación de pelota local, reflejada en una gran diferencia en asistencias (26-16) y sobretodo en la relación asistencias/pérdidas (26/13-16/16, 2-1).

• El pésimo porcentaje en tiros libres visitante (13/25, 52%) contra un superior aunque tampoco brillante 13/17 (76%) del MoraBanc.

• El MoraBanc logró hoy proteger el rebote defensivo, su talón de Aquiles en las últimas fechas. Solo concedió 7 segundas opciones, prácticamente la mitad de lo que viene siendo habitual.