Con un estrecho margen de preparación entre su último viaje liguero y la Final de la Copa Princesa, el Delteco Gipuzkoa ha exprimido al máximo su planning de trabajo con diferentes sesiones de recuperación, trabajo y en pista y trabajo táctico con las que llegar a la final en el mejor momento posible para sus intereses. .

Corría la media noche del pasado viernes cuando la expedición del Delteco Gipuzkoa Basket se subía al autobús en el Palacio de los Deportes de Huesca para comenzar a preparar desde la carretera su participación en la Final de la Copa Princesa de Asturias.

Un desplazamiento de algo más de tres horas y que desembocó en la llegada del equipo a San Sebastián ya de madrugada para gozar así de cerca de día y medio de descanso en los que oxigenar cabeza y cuerpo antes de retomar las sesiones de entrenamiento.

No fue hasta la mañana del domingo cuando el equipo recuperó la actividad con una sesión que entremezcló recuperación y trabajo prepartido y la cual tuvo su continuidad en la mañana del lunes con una última práctica sobre la cancha del Josean Gasca de San Sebastián. Dos sesiones antes de iniciar el viaje a Valladolid en una tarde de martes en la que dar comienzo al trabajo ya sobre el terreno.

De vuelta al autobús para comenzar una concentración habitual

Pocos cambios -por no decir ninguno- ha experimentado en esta ocasión el plan de viaje del equipo donostiarra respecto al de cualquier otra semana de la temporada. Así, el conjunto vasco volvió a subirse al autobús a las 15:30h del martes para recorrerlos 337 kilómetros que separan el Josean Gasca del Polideportivo Pisuerga. Una distancia recorrida en algo más de 3h30´ y en la que el equipo tuvo tiempo de realizar una parada con la que reponer fuerzas.

Fue, con su llegada a la capital vallisoletana, cuando el grupo realizó una sesión de activación en los aledaños del hotel. Concretamente un paseo y estiramientos en las inmediaciones de la Plaza de Colón con las que romper con el tiempo de autobús antes de realizar la tradicional cena de equipo ya en el hotel.

Con el "toque de queda" marcado ala media noche, el equipo se citó de nuevo para desayunar en las dependencias del hotel antes de desplazarse por primera vez a la cancha de juego. Así, Marcelo Nicola dirigió de 12 a 13h una última sesión de trabajo focalizada en el tiro y que estuvo acompañada de diferentes charlas individuales del técnico con sus jugadores.

Todo ello antes de retirarse de nuevo al hotel de concentración para iniciar la habitual rutina prepartido: comida + siesta + scouting + salida al pabellón. Un punto de partida marcado para las 18:45h y con el que comenzará la final en la que los donostiarras podrían llegar a conquistar el primer título copero de su historia.