| La dictadura del TAU y la crisis ACB |
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La fase regular de la Liga ACB está siendo un monólogo de los hombres de Dusko Ivanovic, que han ganado a todos sus rivales menos a uno, el Bruesa, que se impuso en el derbi vasco. Un monólogo que la máquina vitoriana tiene que intentar trasladar a Europa para este año conseguir, por fin, esa Final Four que tanto lleva persiguiendo.
El partido disputado en Vitoria ante Unicaja fue una nueva muestra de la superioridad de los de Ivanovic. Apasionante lesión táctica de ambos conjuntos y, desde el primer instante, se pudo ver que el tanteo iba a ser brillante, e incluso recordaba a aquel espectacular Unicaja-Barcelona en el que ambos superaron el centenar de puntos. Una vez más, el rey Rakocevic se coronó ante sus súbditos de Unicaja. Seguro que más de algún aficionado del Martín Carpena lamenta por qué el serbio no ha militado en las filas verdes todavía.
Pero esa dictadura vitoriana no hace sino recordar que la fase regular de la ACB es, triste y simplemente, una carrera de eliminación. No se trata de ganarla, sino de evitar caer antes de tiempo. Por eso, exhibiciones como las del TAU puede que no sirvan de nada si en los 'playoffs' con dos victorias te mandan a casa.
Partiendo de este caso, habría que pedir a la ACB que consiga una forma de evitar que las diferencias abismales conviertan la fase regular en eso, evitar caer; y aporten más espectáculo. Porque se acabará convirtiendo en un problema si el mejor equipo de la fase regular vuelve a caer a las primeras de cambio.
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