| Cracovia y el nombramiento como seleccionador |
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Son ya muchas semanas sin escribir en el blog y numerosos los acontecimientos que han ocurrido en todo este tiempo.
Sigo disfrutando en Cracovia de una magnífica experiencia tanto en lo personal como en lo profesional, nunca pensé que la adaptación fuese tan fácil y el estar tan lejos de casa tan llevadero, pese a la dificultad que tiene no tener cerca a los tuyos en algunos momentos y a la diferencia de clima, pues semanas atrás llegamos a estar con -20 varios días seguidos y la nieve parece que será nuestra compañera durante mucho tiempo todavía.
Mediado el mes de febrero, la gran noticia para nuestro equipo, el Wisla Can Pack, es la clasificación para cuartos de final de Euroliga, estamos a dos partidos de la Final Four, algo que era difícil de pensar para un equipo invitado a última hora y configurado para jugar la Eurocup. 11-2 es nuestro balance en la máxima competición continental y seguimos invictos en casa (7-0), sin duda esa tiene que ser la llave para conseguir estar entre los 4 mejores de Europa. Y más si tenemos en cuenta la excelente respuesta de nuestro público, que llena a rebosar nuestro vetusto pero a la vez acogedor pabellón. Y es que llegar una hora antes del partido y ver las gradas repletas de aficionados cantando y animando, es algo que nunca me había pasado y eso que estoy acostumbrado a la que es posiblemente la mejor afición de Europa, la de Salamanca. Son nuestra sexta jugadora y con su apoyo esperamos seguir cosechando éxitos.
Pero lo más positivo de la victoria ante Pecs no es la clasificación por primera vez en la historia del club para cuartos de final de Euroliga, sino que como equipo estoy seguro de que hemos dado un importante paso adelante, pues hemos sabido sufrir y mantener la cabeza fría en el momento decisivo de la eliminatoria. Cuando ya son 5 meses compitiendo, lo más importante en un equipo es saber afrontar las distintas situaciones que se plantean. Los buenos resultados ayudan a crecer en confianza y a seguir trabajando en el día a día y la victoria ante Pecs es un golpe anímico importante para nosotros en este tramo final de temporada lleno de momentos difíciles (Cuartos de final de Euroliga, semifinal de Copa contra Lotos en su pista o Play offs de liga con posible desventaja de campo en semifinales si eliminamos a Torun en cuartos).
Pero sin duda el momento más agradable y quizás sorprendente de las últimas semanas para mí, fue la llamada de la Federación Española para hacerme cargo de la selección absoluta. Cuando han pasado unos días desde que conozco la noticia, aún siguen llegándome felicitaciones y es que son muchas las personas del baloncesto tanto a nivel nacional como especialmente de mi tierra, de Salamanca, que me hacen llegar su cariño y su apoyo en esta nueva etapa. Una etapa que espero disfrutar al máximo como ya hice en estos últimos años con la selección U16. Desde luego que serán inolvidables los momentos vividos en los 3 Campeonatos de Europa con la U16 y quiero destacar la gran labor de todos los miembros del cuerpo técnico que he tenido a mi alrededor, ellos sin duda fueron mi soporte para que como cabeza visible alcanzásemos tres medallas que nos llenan de orgullo y que alcanzamos formando lo más importante, un verdadero EQUIPO.
Ahora empiezo una nueva etapa con la máxima ilusión y con la gran responsabilidad de conducir el timón de un barco lleno de grandes marineros, pues contar con las mejores jugadoras de nuestro país es lo máximo a lo que puede aspirar un entrenador de baloncesto. Aún estamos a varios meses del Campeonato del Mundo, pero el tiempo pasa deprisa y cuando nos queramos dar cuenta, se irá echando encima, por eso desde el primer día hay que trabajar y para ello hay mucha gente preocupada porque todo salga bien. Nuevamente empiezo a vivir desde la distancia y preparando los primeros aspectos de la concentración, algo que es clave desde que trabajo en la Federación, la clave del éxito en todas las categorías, el trabajo en EQUIPO.
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