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29.12.08 | Rafael Escobar (2007 lecturas)

Aprovechamiento de canteras

Decir que las canteras de Joventut y Estudiantes son las dos mejoras canteras del basket español es de Perogrullo, viendo la cantidad de jugadores que han salido de estas canteras en el pasado y en el presente. Sin embargo, el aprovechamiento que realizan en sus clubs ACB de tan prolíficas canteras es muy diferente. Me explico. Mientras la Penya no para de utilizar jugadores y subir jugadores al primer equipo, Estudiantes se encuentra en stand-by en la promoción de jugadores al primer equipo.

¿Por qué pasa todo esto?

Se puede argumentar que jugadores como Ricky en este momento, o Rudy años atrás, son jugadores con talento natural, pero no solo son estos jugadores los que disfrutan de minutos, sino que también los disfrutan jugadores como Pau Ribas y Henk Norel y empiezan a tenerlos Eyenga, Franch o Pere Tomas, sin olvidarnos de otros que vienen desde atrás pidiendo ya, como mínimo, atención.

Sin embargo, el caso de Estudiantes es todo lo contrario. Cierto es que la dinámica del equipo no es la correcta pero son jugadores con enormes cualidades, ganadores en dos ocasiones del torneo más prestigioso que se disputa entre equipos de cantera (Circuito sub-20), que no ven que se reconozcan sus méritos con minutos en el primer equipo. Son los casos de Javi Beirán o Daniel Clark, por ejemplo.

Economía

Es cierto que Joventut vive una mejor situación economía que le permite contratar grandes jugadores extranjeros y marchar en dinámica positiva, siendo, por tanto, más sencillo ir introduciendo canteranos, pero, resulta sangrante que Estudiantes, que muestra un problema económico tan grave (se apunta incluso riesgo de desaparición si no se completa la ampliación de capital que se está realizando en estos momentos) no dé paso a la cantera. Cuando un equipo no tiene suficiente potencial económico para fichar jugadores que den un gran nivel en todos los puestos, lo más normal es que se utilicen esos pocos recursos económicos en fichar dos o tres jugadores de gran nivel y completar con gente de la cantera y hombres de club con Pancho Jasen. Sin embargo, Estudiantes hace todo lo contrario: ficha jugadores para todos los puestos pero ninguno supone un salto de calidad, por lo que se cometen dos errores graves: se fichan jugadores que no dan gran nivel y lo peor para un equipo de cantera, estos jugadores cierran el paso a la cantera. Resumiendo este punto, Estudiantes debería volver a lo que ha sido toda la vida: dos jugadores americanos de nivel, dos, tres, máximo cuatro jugadores españoles o comunitarios de complemento más seis, siete u ocho jugadores de cantera aunque la dinámica del equipo sea tan mala como es.

Se puede pensar que es una locura y lo comprendo, pero ¿qué prefiere el aficionado estudiantil? Jugar y luchar por la permanencia jugando con un quintero en el que se encuentre Granger, Beirán, Suárez, Clark y un pívot americano o hacerlo con un quintero formado por Cummings o el base americano que se fiche, Udrih, Jasen, Popovic y Wideman. Créanme que la mayoría, los que conocen los valores del ‘Estu’, elegirían la primera opción.

Ejemplos prácticos y comparaciones

Para finalizar me gustaría poner unos ejemplos. Me gustaría que os paraseis a pensar en varias comparaciones: Clark y Norel; Beirán y Ribas; Casimiro y Sito Alonso. En el primer caso, me gustaría que os cuestionaseis dos preguntas en este orden:

1º) ¿Qué jugador tenía más proyección el inglés o el holandés? 2º) ¿Qué jugador es en la actualidad mejor y “está más hecho”?

A la primera pregunta, ambos jugadores tenían similar proyección, ambos destacaron en categorías inferiores y el año anterior cumplieron un año puente en LEBOro, Norel en Alicante y Daniel en Lugo, es decir, trayectorias similares, ambos levantaban gran expectación en sus equipos y aficiones. ¿Y la segunda cuestión? Creo que está claro que Norel pero por una sencilla razón: Norel disfruta de minutos y está explotando jugando cada día mejor. ¿Clark? Pues ve como pasan los minutos en el banquillo mientras los ‘4’ estudiantiles no demuestran nada sobre el parquet. Casimiro, háztelo ver. Segundo caso: Ribas contra Beirán. Los argumentos del primer caso se utilizan en éste. Los dos jugadores prometen mucho en categorías inferiores pero uno tiene minutos, otro solo en el segundo cuarto…

Tercer y último caso: Casimiro y Sito Alonso o lo que es lo mismo, no confianza frente a confianza. Mientras Sito Alonso da oportunidades a su cantera y resulta envidiable ver los últimos minutos del partido de la Penya en Ljubljana donde acaban el partido cinco canteranos (Ribas, Franch, Tomas, Norel y Eyenga) en pista con Ricky en el banquillo, Casimiro se presenta como entrenador de MMT Estudiantes diciendo que “Estudiantes es un equipo de cantera” pero él parece que no está dispuesto a demostrarlo pues solo Granger disfruta de muchos minutos y Suárez juega hasta el minuto 35 porque parece que no sirve para los últimos minutos, mientras Clark y Beirán “sostienen la toalla”.

¿Futuro a corto plazo?

El Joventut ganará partidos, crecerán sus canteranos con Ricky ya al mando, se clasificará para la Copa, disfrutará en la Euroliga y después jugará playoffs; Estudiantes vivirá otro drama, luchará por la permanencia agarrándose al espíritu de Pancho y su afición y la cantera seguirá siendo mirada de reojo con jugadores destacando en inferiores y siendo “marginados” en ACB. ¿Hasta cuándo este error? ¿Pasará esto con Driesen?