Las Historias de Sunara: Previa de la final y partido por el bronce

Ya sólo quedan los dos partidos finales, así que vamos con algunos datos y curiosidades de los dos últimos enfrentamientos.

Empezamos, al contrario que la organización, por el partido por el bronce. Y es que, pase lo que pase, la primera conclusión del Australia-Eslovenia es que el ganador va a hacer historia, porque ninguno de los dos sabe lo que es lograr una medalla olímpica. Lógico en Eslovenia, siendo su primera participación, cercano a una maldición ya en el caso "aussie". Cinco semifinales olímpicas y una mundialista y, de momento, un balance de 0 victorias y 11 derrotas acumula Australia en los partidos por medalla. En el lado bueno de la balanza cabe recordar que al menos en Río y Pekín sí que compitió hasta el final.

Eslovenia, por su parte, ha jugado en una ocasión por la medalla de bronce. Fue en el EuroBasket 2009 y acabó perdiendo ante Grecia en un partido donde acusó el palo de la dura derrota en la prórroga de las semifinales ante Serbia. Tras dominar durante buena parte del torneo, la quinta falta de Lorbek cortocircuitó a los de Zdovc, que dejaron ir ventajas de más de 10 puntos. Lakovic tuvo un tiro libre para un +4, pero erró y un triple de Teodosic (31 puntos) mandó el partido a la prórroga.

Y quizá sea esa siempre una de las grandes claves para hablar de un partido por el bronce: la gestión de la derrota en semifinales. Dura para ambos, la forma de producirse quizás haya sido más difícil de gestionar para Eslovenia que para Australia. En partidos habitualmente menos trabados que las finales, el estado físico será la otra gran clave entre dos equipos con un estilo rápido y bastante directo. ¿Tiene Australia mimbres para gestionar la defensa a Doncic?

Directamente Thybulle o Exum pueden ser fundamentales e incluso cabe la sorpresa de "tirarle" a Green, compañero en los Mavs y con poco papel en los Juegos. Pero, de nuevo, probablemente la pelota esté en el tema mental... y en el tiro, claro. Han llegado a semifinales los cuatro equipos con mejor media anotadora y Australia aparece como la segunda mejor triplista frente a una Eslovenia que ha ido a menos en dicha parcela, y que no llega al 70% en tiros libres.

¿Qué dice la historia? Sin enfrentamientos, obviamente, en los Juegos, Eslovenia y Australia se han encontrado un par de veces en los Mundiales, en 2010 y 2014. Y ojo, porque aquí sí que hay cierta miga...

El primer enfrentamiento se daba en el Mundial de Turquía dentro de los octavos de final. Allí había llegado Australia tras una buena primera fase, incluyendo la enorme paliza a Alemania, y Eslovenia tras una sorprendente marcha en el grupo. Con Becirovic sustituyendo a Zdovc en el banquillo, Eslovenia se presentaba al Mundial con un juego interior corto y las bajas en él de Lorbek, Smodis y Nesterovic, pero pese a ello acababa segunda en su grupo tras Estados Unidos. Lo hacía imponiéndose a Croacia y, sobre todo, a Brasil en una de las sorpresas del Mundial. Un equipo brasileño que el día antes, de la mano de la pareja Huertas-Splitter, había rozado la machada ante la USA de Durant. Pese a esa solvente primera fase Australia partía como favorita... pero el partido derivaría en una masacre eslovena y un +29 final ante la impotencia de los Boomers y algún conato de falta dura. De aquel precedente no queda ningún jugador en Eslovenia, mientras que en el lado oceánico, dirigidos por un Brett Brown que bien pudo ser el seleccionador en Tokio, permanecen Mills, Ingles y un Baynes que sigue siendo baja, pero que en su día pasó, entre otros equipos europeos, por el Olimpija siendo compañero de Rupnik, Blazic, Prepelic... y Dino, hermano de Edo Muric.

Si aquel enfrentamiento de 2010 tuvo su aquel, el de cuatro años después sería aún más caliente. Encuadrados en el mismo grupo y favoritos en él junto a Lituania, su duelo en ese Mundial se jugaría en la pista y fuera de ella... Cara a cara en el debut, Eslovenia se imponía por 90-80 con 31 puntos de los hermanos Dragic en un partido del que sobreviven hoy en los Juegos Zoran, Prepelic, Muric, Blazic, Dellavedova, Ingles, Exum y Baynes.

Con ambos equipos cumpliendo el expediente ante los equipos más "flojos" del torneo, el siguiente polo de atención llegaba con la victoria de Australia ante Lituania por siete puntos, dejando el desenlace para la última jornada del grupo, con un trascendental Eslovenia-Lituania. Una victoria eslovena les dejaba primeros y a los aussies segundos, pero con el partido encarrilado dos triples de Maciulis al final del tercer cuarto acercaban a los bálticos antes del hundimiento de una Eslovenia que se quedaba en sólo dos puntos en el último cuarto. Pese a esa pírrica anotación sólo caía por tres, y todo quedaba a expensas del Australia-Angola. Una victoria australiana llevaba el grupo al triple empate, lo que dejaba a Eslovenia primera y Australia segunda. ¿El problema? El segundo clasificado tendría a USA en cuartos.

Con 13 arriba al descanso para Australia nada hacía indicar que fuera a pasar algo raro... pero en la segunda parte, Australia, de una manera bastante mal disimulada, entregaba el partido para caer por 8 puntos y ser así tercera entre risas en los banquillos y silbidos en la grada de la delegación eslovena, que se había quedado a ver el partido. Un par de jugadores australianos se dedicaban a lanzar besos desde el banquillo desatando una tensión que llevaría a un serio encontronazo en el viaje posterior a la sede de Barcelona.

"¿Te has fijado que cursi la moraleja del cuento de la lechera?", cantaba Pla... Y cursi o no, el caso es que a Australia la calculadora acababa por salirle mal, y es que en su empeño por evitar a USA acababa por caer en la ronda anterior ante la Turquía de Ataman. Lo hacia además con dos triples finales de Preldzic, ex internacional esloveno, y con varios jugadores eslovenos en la grada aplaudiendo...

Tras la victoria de Japón ante Francia en la semifinal del torneo femenino, no habrá reedición de la final de 2012 ni oportunidad de tener la misma final en los torneos femenino y masculino. En el masculino, será la tercera final de la historia entre Francia y Estados Unidos, lo que iguala el duelo con el España-USA y el Yugoslavia (cuento a la de 1996)-USA como segunda final más disputada de la historia. Por delante, claro, los URSS-USA. Salvo en la final de Munich 1972, Estados Unidos siempre ha ganado el último partido del torneo.

Francia llega tras haber sido el primer equipo de la historia en vencer en dos partidos oficiales consecutivos a una selección de Estados Unidos con jugadores NBA (Australia lo hizo en amistosos). Para los galos, la llegada a la final confirma el nuevo proyecto iniciado en China, despeja las dudas de la etapa post-Parker y cierra la herida olímpica. Fuera en los cuartos de 2016 y 2012, llega tras vencer a Italia y Eslovenia, las que la dejaron sin Juegos en 2004 y 2008.

En China los galones a Fournier y De Colo cambiaron la cara a un equipo aún irregular. Collet exploró a Nando como 1 y a Batum como 4 en ocasiones alternas para tener a los tres muchos minutos en pista juntos. Este año Nando en el Fener y Batum en los Clippers han tenido muchos minutos en esa tesitura, facilitando el papel en la selección. Para los que amamos Cholet y su cantera, el torneo de Nando nos retrotrae inevitablemente al de Antoine en Sidney. De allí salió también Gobert y gente como Beaubois, Seraphin, Causeur, Bilba, Gobert o Hayes.

Y es que, pese a sus sonados tropiezos, la última década francesa no es nada mala. Plata, oro y bronce en los Europeos entre 2011 y 2015 y medalla de bronce en los dos últimos Mundiales, a esas dos victorias consecutivas hay que añadir el gran partido que hicieron frente a USA en los Juegos de Río. ¿Pueden repetir? Desde luego es complicado dada la mejora de una USA a la que el tiempo corre a su favor tras su mala preparación. Recordada por el mate de Carter, lo cierto es que la final de Sidney fue relativamente disputada... y muy parecida a lo que había sido su duelo en la fase de grupos. Un precedente al que agarrarse. Aunque en eso ha habido de todo, y hoy está Foirest en el equipo técnico.

USA no ha tenido, históricamente, problema en repetir triunfo, pero Argentina 2004 o URSS 1988 ya fueron campeonas venciendo a un equipo con el que habían perdido en la fase de grupos. Francia 2013, España 2009 o Rusia 2007 también lo hicieron en el EuroBasket. ¿Volver a explotar los dos grandes? ¿Ir a pequeños con Batum de 4? Para ganar a USA probablemente necesiten explorar ambos escenarios, cuidar la bola, meter de fuera... y esperar el momento. Parece más fácil sorprender desde atrás que mandando de inicio...